¿Qué pasaría si no existieran los pozos de visita?
Los pozos de visita en la actualidad forman una parte fundamental en cualquier sistema de alcantarillado. Conformados por brocales de fierro fundido y su respectiva tapa, permiten el acceso a la infraestructura de tuberías para realizar evaluaciones y diagnósticos.
Gracias a la existencia de los pozos de visita se pueden prevenir fallas en las tuberías e incluso hacer reparaciones necesarias antes de que se agraven. También, cuando ya es necesaria una reparación completa se puede hacer con mayor facilidad gracias al fácil acceso a través de los brocales de fierro fundido.
Pero, alguna vez te has preguntado, ¿Qué pasaría si no hubiera pozos de visita? Muchas veces puede pasar desapercibida su relevancia, pero lo cierto es que gracias hay un ahorro económico considerable.
A continuación, te presentamos 4 consecuencias que se derivarían de no existir pozos de visita.
1. No habría oportunidad para prevenir fallos
Al no existir los pozos de visita no habría forma de ingresar para realizar inspecciones. Por lo tanto, se tendría que estar a la expectativa de ver cuándo habrá un fallo. Y este probablemente se de a notar cuando una gran parte de la infraestructura se encuentre dañada.
Claro que, la solución inmediata a esto sería hacer tuberías y conexiones más resistentes. No obstante, existen muchos factores que pueden llevar a que la infraestructura se dañe. Y, aunque fueran más resistentes lo cierto es que necesitarían aun así de mantenimiento constante.
2. Habría un mayor gasto económico
¿Por qué? Por dos factores: uno, hacer piezas más resistentes implicaría un mayor gasto; y dos, sería un reemplazo constante de las piezas debido a la falta de mantenimiento y prevención de fallas en las tuberías.
Por lo tanto, habría una mayor inversión sobre las infraestructuras de alcantarillado. Terminaría siendo un gasto importante y podría afectar a la economía nacional.
3. Excavaciones por doquier
De no haber pozos de visita que nos permitan evaluar de dónde proviene una falla, lo cierto es que sería sumamente complicado ubicarla y hacer la reparación o el cambio de la tubería.
Aquí implicaría un gasto no solo de dinero, sino también de tiempo. Se necesitaría equipo especial y realizar cálculos específicos para detectar la falla que se haya producido. Esto con el propósito de evitar hacer excavaciones innecesarias y hacer la reparación lo más pronto posible. De otra manera toda la estructura podría verse comprometida.
4. No habría brocales de fierro fundido
Los brocales de fierro fundido son pieza base de los pozos de visita. Sin ellos, no tendría mucho sentido fabricar brocales. No obstante, seguramente se podrían instalar en otras estructuras de alcantarillado.
Instala pozos de visita en tu proyecto
Los pozos de visita son sumamente importantes para que el alcantarillado funcione correctamente. Nos proporcionan un ahorro de tiempo, dinero y materiales, además de que nos dan una mejor calidad de vida.
Todo lo que compone al pozo debe ser provisto de estructuras de alta calidad. Por ejemplo, si los pozos no contaran con brocales de fierro fundido de buena calidad, estos no garantizarían su protección o un acceso fácil.
Se debe encontrar el equilibrio perfecto en las tapas y brocales de fierro fundido, puesto que, se necesita seguridad para que personas ajenas al servicio de mantenimiento ingresen y, que la entrada para ellos (personal de mantenimiento) no sea complicada.
Todos estos puntos se deben de tomar en cuenta al momento de adquirir tanto el pozo, como el brocal de fierro fundido y la tapa.
¿Dónde comprar brocales de fierro fundido de alta calidad?
Para tus pozos de visita, Fundidora Monte de Sión cuenta con brocales cuyo proceso de fabricación es estricto; contamos con controles de calidad que nos permiten brindarte las mejores piezas de alcantarillado.
Puedes hacer tus brocales a medida o bien, adquirir los prefabricados.
Si requieres alguno, ponte en contacto. ¡Será un placer atenderte!
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